Es la eliminación por aspirado de secreciones retenidas en la boca, laringe, tráquea y/o bronquios a través de la boca o la nariz, o bien mediante traqueotomía, con el objetivo de mantener las vias aéreas permeables, facilitar el intercambio de gases y favorecer el confort de la persona afectada.
Consideraciones de enfermería:
-Se puede valorar la necesidad de aspiración observando las características de la respiración y la tos de la persona, o bien mediante la auscultación del tórax.
-Para una mejor valoración de la situación respiratoria, es aconsejable consultar la gasometría arterial.
-Antes y después de la aspiración deben valorarse los ruidos respiratorios y las constantes vitales.
-Si la persona se halla consciente, debe explicársele el procedimiento que se va a efectuar antes de iniciar la práctica.
-Aspírese sólo cuando sea necesario, y no de forma rutinaria. Existe un elevado riesgo de traumatismos a causa de la aspiración frecuente.
-En el ambiente hospitalario, la aspiración traqueobronquial debe realizarse siempre mediante técnica estéril.
-Durante el proceso, debe aclararse la sonda con agua bidestilada.
-El aspirador debe mantener una presión negativa de 80 a 120 mm Hg cuando se cierre la boquilla de aspiración.
-Nunca debe aspirarse mientras se inserta la sonda.
-La aspiración no debe superar los 8-10 segundos, y debe realizarse mientras se retira la sonda, a la vez que se imprime un ligero movimiento de rotación.
-Entre una y otra inserción de la sonda, déjese que la persona realixe 4 o 5 respiraciones, o bien adminístrense 4 o 5 compresiones de ambú.
Consideraciones de enfermería pediátrica:
-En los lactantes y niños pequeños, la aspiración no debe superar los 5 segundos.
-Para la aspiración de los neonatos, en caso de que las secreciones no sean muy espesas, la sonda adecuada es la de tamaño 6 French. En los niños de mayor edad puede utilizarse una sonda de 8 a 10 French. Nunca debe ocluirse completamente la vía aérea con la sonda. En los niños no se deben superar los 100 mm Hg de vacío.
-En la aspiración a través de una traqueostomía, la sonda no debe ser superior a un tercio del diámetro de la luz del tubo de traqueostomía. Debe dejarse espacio suficiente alrededor de la sonda para el paso del aire.
-En los niños, los signos más precoces de distrés respiratorio son la taquicardia y la intranquilidad.